top of page
  • Foto del escritorJimmy Garcia Camargo

Mi destino me puso al frente de un cargo muy importante

Actualizado: 1 ago 2020

Tenía 22 años, pese haber estado en el cargo de forma interina, la responsabilidad era muy grande. Mi físico era la de un muchacho, sin ninguna experiencia.


Un día estando en los pasillos de la emisora un señor que entraba me dijo:


- por favor el director.


y le respondí:


-a la orden.


y él un poco molesto me dijo:


-necesito al director.


Lo único que atiné fue llevarlo a mi oficina, sentarme en mi escritorio y repetirle,


-a la orden.


Este curioso hecho hizo que me dejara el bigote, necesitaba aparentar más años.



Ya como Director en propiedad, lo primero que hice fue dejar los programas que estaban bien en sintonía y que tenían una gran trayectoria, como el caso de los noticieros que recuerdo eran, El FENIX… Dirigido por el Doctor Antonio Cacua Prada. LOS CATEDRATICOS INFORMAN, un programa en el que participaban cinco personajes talentosos, preparados y de mucha experiencia.


Ellos hacían análisis sobre temas de actualidad y resolvían inquietudes de los oyentes. Al medio día, y desde la sala que tenía un piano, se originaba el programa dirigido por el pianista y compositor Gerardo Sansón quien semanalmente escogía un cantante.


Por allí pasaron los mejores contantes colombianos del momento, entre ellos: VICTOR HUGO AYALA. LA SERENATA GALANTE, un programa a cargo de un cuarteto que se llamaba “Los Cuatro Amigos”, cuyo director, me acuerdo mucho, era el que tocaba LA CÍTARA.


Para este programa, semanalmente se escogía una dama de la capital a quien se le llevaba la serenata y dos locutores con libreto en mano hacían una apología de la persona que recibía la serenata, resaltando sus atributos físicos e intelectuales y todo lo que fuera parte de su personalidad.




Se tenían programas deportivos y se transmitían eventos con PASTOR LONDOÑO PASOS, magnífico locutor deportivo. Como en toda emisora grande, teníamos Radio Novelas que se grababan con un elenco de planta, con actores y actrices, de primera categoría y muchos de ellos pasaron con el tiempo a la televisión.


 


Como director, me invente: LA SERENATA EN AZUL, ésta, era como la Serenata Galante pero para los hombres, y lógicamente era interpretada por un Trío FEMENINO. (en el articulo dice para damas, pero en realidad era para hombres).







En un Diciembre en el que ya no tenía presupuesto para contratar personal y el de planta salía a vacaciones, hice un elenco con los empleados de la parte administrativa: mensajeros, discotecaríos, secretarias, etc. y con la colaboración de Jorge Bustos, en la grabación y musicalización, hicimos una dramatización de la navidad tomando algunos pasajes bíblicos. Y atérrense… nos ganamos el premio a la mejor programación Navideña, que en ese entonces tenía instituido, El Ministerio de Comunicaciones.




Realicé, en compañía de Julio Nieto Bernal, que en ese momento estudiaba Derecho, el programa LOS NUEVOS PENALISTAS EN LOS GRANDES PROCESOS. Consistía en hacer audiencias públicas, con la participación de alumnos de las facultades de Derecho quienes desempeñaban el papel de JUEZ, FISCAL, DEFENSOR, MIEMBROS DEL JURADO y TESTIGOS. Tratábamos casos que traían los libros de los tratadistas del derecho penal, como ERICO FERRI, JIMENEZ DE AZUA y de las grandes audiencias públicas en distintos países.


Con la colaboración de Pastor Londoño, realizamos LA VUELTA A COLOMBIA EN CONOCIMIENTOS, consistía en que los alumnos de quinto y sexto de Bachillerato (hoy grados 10 y 11) de diferentes colegios, eran los “ciclistas” participantes en la carrera, e imitando las vueltas a Colombia, el programa se hacía por etapas. Los participantes debían contestar preguntas de historia y geografía de las regiones, que en el libreto se establecía para cada etapa, y con un tiempo determinado, en el paso por regiones, que los locutores deportivos iban narrando para que en la medida que respondían bien podían avanzar, y si el concursante no contestaba en el tiempo establecido o era errada la respuesta… perdía puestos. Más o menos, como el juego de “CABEZA Y COLA” que se utilizó en la enseñanza, pero aquí con todos las formas de transmisión de las Vueltas a Colombia. Ahora que hablo de las Vueltas a Colombia, en LA VOZ DE COLOMBIA transmitimos algunas etapas, no la vuelta a Colombia completa, porque no podíamos interrumpir la programación habitual debido al compromiso que se tenía con los anunciadores.


 

En muchas ocasiones trasmitimos eventos políticos, recuerdo uno que yo viví, en el TEATRO COLÓN. Se llevaba a cabo una reunión del partido conservador y en algún momento presentaron una moción, alegando que la discusión no podía continuar sin la presencia del Doctor LAUREANO GÓMEZ, por lo cual se tuvo que suspender la reunión y se nombró una comisión para ir hasta la casa del Doctor Gómez. Después de tres cuartos de hora, se anunció la llagada del “Caudillo”, y al ingresar éste al recinto,los aplausos, los pañuelos blancos y la algarabía de los asistentes parecían un recreo de niños entusiasmados, y yo que estaba transmitiendo, escuchando esto me contagié, y con verdadera emoción decía: “LOS CIMIENTOS DE ESTE TEATRO COLÓN SE ESTREMECEN DE EMOCIÓN POR LA LLEGADA DEL DOCTOR LAUREANO GÓMEZ, LOS PAÑUELOS BLANCOS PARECEN PALOMAS MENSAJERAS QUE PRESAGIAN UN GRAN ENCUENTRO”. Al finalizar la trasmisión, el operador me dijo:


-Don Jimmy ¿luego usted no es liberal?


Le dije: -sí, ¿por qué?


Y el operador me respondió:


-¿por qué le decía tantas cosas bonitas a ese viejo?


Y le contesté:


-porque en ese momento yo era un comunicador y tenía que contarle a la audiencia lo que estaba viendo y oyendo y eso me emocionó. Lo que hice fue transmitir la vivencia… del momento.


Otro aspecto importante de LA VOZ DE COLOMBIA, eran sus técnicos, recuerdo a Guillermo Padilla, Pachito Cerón, Raúl Henao y otros que formaban un equipo, para mantener un muy buen sonido y un mayor cubrimiento nacional.



 


Para cerrar mi paso por la VOZ DE COLOMBIA, traigo a colación un hecho que nunca he podido olvidar. Eran las nueve de la noche, me disponía a sentarme a comer, cuando contesté una llamada. Mi sorpresa fue grande. Era el Doctor Carlos Albornoz:


-Don Jimmy ¿ya se acostó?, fue su saludo,


le dije:


-no Doctor, ¿por qué?


A lo que me contestó:


-por favor, manténgase despierto no se ponga pijama, le cuento que EL GENERAL ROJAS PIINILLA VA ENTREGAR EL PODER Y NOSOSTROS DEBEMOS DAR “LA CHIVA”, yo lo estoy llamando.


Así pasé toda la noche en la que me llamaba más o menos cada hora. A las 5 de la mañana me llamó, y con una voz temblorosa como de emoción, me dijo:


-ROJAS PINILLA, cayó. Ya paso por usted para que abramos la emisora y seamos los primeros en dar “la chiva”


Cuando me estaba disponiendo a salir, me acordé que las llaves de la emisora las tenía el operador de turno, por lo tanto teníamos que ir a buscarlas a su casa. Cuando pasaron por mí, en el “transmovil” de la emisora que era manejado por el jefe del Departamento Técnico, tomamos la avenida Caracas hacia el sur y comenzamos a ver soldados del ejército a derecha e izquierda. Al llegar a la calle decima, nos pararon y como el Doctor Albornoz iba gritando “VIVA LA LIBERTAD SE CAYÓ EL TIRANO” un suboficial nos dijo:


-¿ustedes qué gritan?


Al oír la respuesta, se montó en el estribo de la camioneta y nos indicó el camino de una guarnición militar.


Al llegar allí, oímos una voz que salía desde una ventana y gritaba:


-Laven a estos que ayer estaban con el gobierno y hoy están en contra de él.


Y, ya no un suboficial sino un oficial de la fuerza aérea, nos hizo caminar hacia una alberca. Al llegar allí, me tomó de los brazos. Yo le replique:


-¡usted no me bota! Yo me boto.


Él, sin decir palabra, me tomó de lo brazos y me botó.


Cuando salí, me dijo:


-¿con que usted es quien se bota? Soy yo el que mando y lo boto cuantas veces se me dé la gana


y me botó.


Afortunadamente, ya la gente estaba gritando y los carros pitando por la posible renuncia del General Rojas Pinilla, lo que desconcertó a los militares, y a nosotros nos hicieron salir de la guarnición. En resumidas cuentas, nos lavaron porque también lo hicieron con el Doctor Albornoz y con el Jefe del Departamento Técnico. Eran ya casi las ocho de la mañana, el General Rojas no había caído y nosotros lavados y temblorosos nos fuimos para la emisora sin dar “la chiva”, y con el dolor de no haber cumplido nuestra misión… Gajes del Oficio.


Éramos tan dados a la amistad y el buen trato, que por ejemplo tuvimos un EQUIPO DE FÚTBOL, QUE SE LLAMO “710 EN SU RADIO.”






94 visualizaciones1 comentario

Entradas recientes

Ver todo

1 Comment


albertogver1
Aug 03, 2020

Tio Jimmy , estas narraciones tuyas al leerla claramente nos transportan al pasado de esa epoca, excelente

Like
bottom of page